Por qué debes incluir aguacate en tu dieta

Marginado durante décadas de la mayoría de las dietas por culpa de un supuesto contenido graso, el aguacate todavía tiene hoy en día sus detractores. Sin embargo, el aguacate es un superalimento, con importantes propiedades regenerativas y antioxidantes, un rico contenido vitamínico, que nos ayuda a luchar contra el colesterol (otro de los mitos sobre esta fruta decía todo lo contrario) o en la prevención de diferentes enfermedades, lo que nos demuestra la importancia de comer aguacate.
Pero esto no es todo, porque también es un quemagrasas. Uno de los principales usos del aguacate es en las dietas, ya que durante la digestión consumimos más calorías de las que nos aporta, por lo que se podría incluir entre los alimentos con calorías negativas. Los beneficios de usar aguacate en nuestro día a día no son pocos, ya que también encontramos beneficios estéticos; y podemos aprovechar hasta el hueso. Vamos a descubrir más a fondo para qué sirve el aguacate.

Beneficios de comer aguacate

Los multivitamínicos o complejos vitamínicos no siempre tienen el mejor sabor, pero si te gusta el aguacate los puedes sustituir perfectamente por esta fruta porque contiene múltiples vitaminas como la vitamina A, la C, la D, la E, la B6, la B12 y la K, lo que lo convierte en un importante protector del sistema inmunológico y ayuda a mejorar el sistema nervioso y cognitivo. Una sola pieza nos aporta el 26% de vitamina K diaria recomendada o un 13% de la vitamina B-6 que deberíamos tomar. Un contenido vitamínico que también tiene efectos anticancerígenos.

Pero el aguacate no es una fuente solo de vitaminas, a ellas hay que sumarles un rico contenido en omega 3 que, entre otras cosas, sirve para regular los triglicéridos y reducir el colesterol malo o para estimular la circulación, la vista o el cerebro. Así se reduce el riesgo de sufrir problemas cardíacos o enfermedades como la diabetes. Sus ácidos grasos monoinsaturados son buenos para la memoria, lo que convierte al aguacate en una fruta muy beneficiosa para estudiantes, mayores o personas que sufren Alzhéimer o alguna otra enfermedad neurodegenerativa.

Otro colectivo que se puede beneficiar, y mucho, del aguacate son los deportistas. Aporta una gran cantidad de energía, ayuda a los músculos a crecer y repararse gracias a las proteínas, el potasio o el zinc que contiene -incluso más que los plátanos- y las grasas buenas incrementan los niveles de testosterona de forma natural. Sin olvidar que reduce las inflamaciones articulares (en este sentido es bueno para quien sufre artritis) y ayuda a reparar los cartílagos.

Ya hemos dicho que al hacernos consumir más calorías de las que tiene nos ayuda a quemar grasas, pero a la hora de perder peso nos ayuda de otras formas. Por ejemplo, nos hace sentirnos saciados antes, por lo que comeremos menos, tiene un gran contenido de fibra y ralentiza la descomposición de los carbohidratos. Además, el aceite del aguacate es detox y ayuda a eliminar desechos tóxicos del organismo. Sus vitaminas y grasas sirven para reparar el cabello, uno de los beneficios más conocidos del aguacate; y podemos hacer mascarillas caseras para la cara o la piel.

El aguacate es beneficioso para las embarazadas

Con tantas propiedades, el aguacate es uno de los alimentos más recomendados tanto durante el embarazo como en la lactancia. En el embarazo refuerza el crecimiento gracias a la vitamina E, y en la lactancia permite ofrecerle al recién nacido una leche materna de alta calidad, con altos contenidos en fibra, vitaminas o ácidos grasos. Y si lo que quieres es quedarte embarazada, se suele incluir el aguacate en las dietas pro-fertilidad -sin olvidar que es un potente afrodisíaco-.

Como ves los beneficios de comer aguacate son muchos y muy variados. Introducirlo de una forma equilibrada y racional en nuestra dieta siempre es una buena decisión, y no olvides que la semilla del aguacate se puede consumir ya sea seca, en batidos o infusiones, tostada, rallada, en ensaladas o incluso sola, aunque su sabor es bastante amargo.